Preguntas Frecuentes

Ceramiche Keope tiene su sede en Casalgrande (RE), Italia, pero cuenta con minoristas y distribuidores de sus productos en todo el mundo. Para encontrar tu Distribuidor más cercano, rellena el formulario (enlace).

La sala de exposición de Ceramiche Keope en Casalgrande (RE) está abierta al público de lunes a viernes de 8:30 a 12:30 y de 14:30 a 18:30.
Para organizar mejor tu visita, te invitamos a concertar una cita con uno de los miembros de nuestro equipo comercial llamando al +39 0522-997511

Ceramiche Keope vende sus productos en Italia y en el extranjero exclusivamente a través de distribuidores de zona seleccionados: Para encontrar el distribuidor más cercano, rellena el formulario aquí (enlace).

El precio del grès porcelánico puede variar en función de varios factores, como la calidad del material, la medida de las baldosas, el diseño y el lugar de compra.
Las baldosas de grès porcelánico de alta calidad suelen tener un precio más alto, pero también ofrecen mejores características técnicas y estéticas. Por ejemplo, el grès porcelánico con acabado pulido puede ser más caro que el de acabado mate. Las baldosas de grès porcelánico que imitan materiales como el mármol o la madera pueden ser ligeramente más caras que aquellas con un diseño más sencillo. El espesor también es un factor que influye en el precio del producto.
Además, es importante tener en cuenta los gastos adicionales como la colocación, la mano de obra y los accesorios necesarios para colocar las baldosas.
Consultar a un profesional del equipo comercial de Ceramiche Keope te ayudará a evaluar las posibilidades disponibles y a identificar un producto de calidad que se ajuste a tu presupuesto. Consulta aquí (enlace formulario).

Para determinar cuántas baldosas pedir, es importante calcular exactamente la cantidad necesaria para cubrir la superficie deseada sin quedarse corto ni excederse. A continuación tienes un procedimiento general a seguir:

Medición de la superficie: Mide con precisión el área que quieres cubrir con las baldosas. Si quieres embaldosar un suelo, multiplica el largo por el ancho para obtener la superficie total en metros cuadrados. Si es para un revestimiento mural, mide la altura y el ancho de la superficie a cubrir.

Cálculo de las baldosas necesarias: en cada paquete de baldosas se indica la superficie que pueden cubrir. Divide el área total que has medido por el área que cubren las baldosas para obtener el número aproximado de paquetes necesarios. Hay que tener en cuenta también cualquier espacio o recorte especial que requiera baldosas cortadas.

Reserva adicional: Es aconsejable pedir una cantidad adicional de baldosas como reserva para compensar posibles errores de colocación, roturas accidentales o futuras necesidades de sustitución. Normalmente, se recomienda añadir entre un 5% y un 10% más a la cantidad total de baldosas necesarias para disponer de material suficiente. Si las baldosas son muy caras o difíciles de encontrar, sería mejor aumentar el porcentaje de reserva.

Consultar un profesional: Si tienes dudas o si la colocación requiere consideraciones especiales, como patrones complejos o rincones difíciles, es aconsejable que consultes al distribuidor más cercano o a tu solador/alicatador de confianza. Ellos podrán ofrecerte una estimación más precisa de las baldosas necesarias en función de la situación específica.

Es importante pedir todas las baldosas de la misma partida para garantizar un color y un diseño uniformes. Además, ten en cuenta que algunas baldosas pueden no estar disponibles en el futuro, por lo que es mejor comprar suficientes para cubrir todo el proyecto.

Siguiendo estos pasos, deberías poder calcular cuántas baldosas pedir para tener la cantidad de material suficiente para completar la instalación sin problemas.

El precio de la cerámica como material para el pavimento puede variar mucho según el tipo de cerámica, el diseño, la marca y otros factores. En general, la cerámica suele ser una de las opciones más asequibles entre los materiales para pavimento. Sin embargo, es importante tener en cuenta que puede haber diferencias de precio importantes dentro de la misma gama de cerámicas.

Por ejemplo, las baldosas cerámicas básicas, sin motivos ni decoraciones especiales suelen ser más baratas que las baldosas de diseño o con acabados especiales. Además, la calidad de la cerámica puede influir en el precio. Las baldosas cerámicas de alta calidad, como las baldosas de porcelánico, pueden ser más caras que las baldosas cerámicas tradicionales.

Algunos materiales para pavimentos, como la madera maciza o la piedra natural, suelen ser más caros que la cerámica. Sin embargo, también hay materiales para pavimentos más caros que la cerámica, como el mármol de calidad o las baldosas vidriadas.

Para conocer de forma más precisa los precios de las baldosas Keope, te recomendamos que consultes al distribuidor local o a la tienda de materiales de construcción más cercana que comercialice la marca Keope. De esta manera, tendrás información más detallada sobre las opciones disponibles en tu mercado local. Solicita aquí (enlace formulario distribuidor) el nombre del distribuidor más cercano.

Encontrar un artículo descatalogado puede ser todo un reto, pero hay varias estrategias que puedes probar para aumentar tus posibilidades de encontrar lo que buscas. Te damos algunas sugerencias:

• Contacta con los distribuidores autorizados de Keope.
• Contáctanos directamente: estaremos encantados de indicarte los minoristas o distribuidores que todavía tienen ese producto en stock o sugerirte alternativas válidas que combinen con tus baldosas de pavimento/revestimiento Keope. 

Recuerda que encontrar un artículo descatalogado puede requerir tiempo, paciencia y un poco de suerte.

Ceramiche Keope produce baldosas de grès porcelánico y puede satisfacer cualquier exigencia en cuanto a superficies y medidas: desde el formato 15x30 cm, hasta los grandes formatos 120x278 cm. Los productos también están disponibles en diferentes acabados, desde el natural al lapeado, hasta el estructurado de 20 mm para uso exterior. Keope también produce placas de grès porcelánico de 6 mm de espesor a 20 mm de espesor para uso en el exterior.

El grès porcelánico es un tipo de material cerámico que se caracteriza por una gran resistencia y perdurabilidad. Es muy utilizado como material para pavimentos y revestimientos, tanto en interiores como en exteriores. El término «grès porcelánico» deriva del hecho de que su composición es similar a la porcelana, pero con una estructura más compacta y una mayor resistencia.

El grès porcelánico se fabrica mediante un proceso de cocción a alta temperatura, que da lugar a la fusión de materiales como arcillas, feldespatos, cuarzo y otros componentes. Este proceso crea un producto final muy denso y compacto, con una baja porosidad. La baja porosidad del grès porcelánico hace que sea muy resistente al agua, a las manchas y al desgaste, por lo que es adecuado para su uso en una variedad de aplicaciones, incluyendo pavimentos sometidos a alto tránsito, zonas al aire libre y zonas sujetas a humedad, como baños y cocinas.

El grès porcelánico está disponible en una amplia gama de colores, texturas y acabados que imitan el aspecto de otros materiales como el mármol, la madera o la piedra natural. Esta versatilidad estética lo convierte en una opción popular para proyectos de diseño de interiores y exteriores.
Además, el grès porcelánico puede fabricarse con diferentes características técnicas, como superficies antideslizantes, resistencia a la abrasión, resistencia a las manchas y otras propiedades específicas en función de los requisitos de la aplicación
Es un material duradero, resistente y versátil que ofrece muchas posibilidades de diseño y prestaciones, por lo que es muy utilizado para una amplia gama de proyectos de construcción y renovación. Si quieres conocer mejor las fases del proceso de producción de una baldosa de grès porcelánico, visita la sección específica (enlace al ciclo de producción).

El grès porcelánico es conocido por su perdurabilidad y resistencia al paso del tiempo. Si se instala y mantiene correctamente, puede durar muchos años. Por lo general, cabe esperar que el grès porcelánico conserve su belleza e integridad estructural hasta 75 años.
La vida útil exacta depende de varios factores, entre ellos el uso y desgaste diario al que se somete el pavimento o revestimiento de grès porcelánico. Por ejemplo, en un entorno doméstico con un tránsito normal de personas, el grès porcelánico puede mantener su calidad durante más tiempo que en una zona comercial muy transitada.
Es importante tener en cuenta que la duración del grès porcelánico puede verse afectada por imprevistos como la caída de objetos pesados o impactos fuertes. Aunque es resistente a los impactos, puede sufrir daños si se somete a fuertes tensiones mecánicas.
Para que el grès porcelánico dure más tiempo, es aconsejable seguir nuestras instrucciones de instalación (enlace) y adoptar un mantenimiento adecuado (enlace). Esto puede incluir una limpieza regular con limpiadores adecuados, evitar el uso de productos químicos agrèsivos o abrasivos y tomar precauciones para evitar arañazos o daños causados por objetos punzantes.
El grès porcelánico Keope es un material conocido por su larga duración y resistencia, conseguidas gracias a las altas prestaciones tecnológicas, una cuidadosa investigación y control de calidad de las distintas fases de producción. Con los cuidados adecuados, la belleza y funcionalidad se conserva durante muchos años.

Para reconocer un grès porcelánico de primera calidad, hay que prestar atención a varios factores al inspeccionar las baldosas. Estos son algunos consejos para identificar el grès porcelánico de alta calidad:

Uniformidad del color: el grès porcelánico de primera calidad debe tener un color uniforme y homogéneo en todas las baldosas, excepto en los productos con una decoración fuerte, característica distintiva de la colección.

Dureza y resistencia: el grès porcelánico de calidad debe ser muy duro y resistente a impactos y a la abrasión. La clasificación de dureza y resistencia de las baldosas Keope está indicada en las certificaciones y numerosas pruebas de calidad realizadas en el departamento de control. (enlace) 

Baja porosidad: Un grès porcelánico de alta calidad tendrá una baja porosidad, lo que significa que absorberá menos agua. Ceramiche Keope declara una clasificación de absorción de agua de las baldosas inferior al 0,1%, lo que indica una porosidad muy baja (norma < 0,5%).

Precisión dimensional: Las baldosas de grès porcelánico de primera calidad tendrán dimensiones precisas y ángulos rectos. Comprueba si las baldosas son perfectamente cuadradas o rectangulares y si las dimensiones son uniformes.

Certificaciones y marcas: Comprueba si la baldosa tiene certificaciones de calidad reconocidas o marcas de garantía. Ceramiche Keope cuenta con numerosas certificaciones tanto por ser un material cerámico respetuoso con el medioambiente como por adherir a los mejores sistemas de proceso cerámico. Consulta las certificaciones aquí (enlace). 

Origen del material: El grès porcelánico Keope se produce exclusivamente en Italia. La filosofía que aplicamos en nuestra labor diaria se resume en el cuidado del detalle, la responsabilidad social, el respeto con el medioambiente y las personas, valores que siempre nos han distinguido, para representar en el mundo la singularidad del Made in Italy. 

Recuerda que si tienes alguna duda o quieres estar seguro de la calidad del grès porcelánico Keope, puedes solicitar información detallada aquí (enlace) a nuestro departamento técnico.

Las baldosas más finas disponibles en el mercado se conocen generalmente como «baldosas ultrafinas» o «baldosas finas». Estas baldosas se caracterizan por un espesor más bajo en comparación con las baldosas tradicionales.
Actualmente, en la gama Ceramiche Keope, las baldosas más finas disponibles tienen un espesor de 6 milímetros y están disponibles en el formato 120 x 278 cm.
Las baldosas finas son apreciadas por varias razones. En primer lugar, por su bajo espesor son ligeras y más fáciles de manipular durante la colocación. Además, pueden aplicarse directamente sobre superficies existentes sin quitar completamente los materiales anteriores, como en los casos de reestructuraciones. Son excelentes para el revestimiento de fachadas ventiladas.

Descubre aquí la selección de baldosas finas Keope (enlace al filtro de espesor en el catálogo de productos).

El espesor del pavimento depende de varios factores, entre ellos el tipo de pavimento elegido, el tipo de uso previsto para la zona, la carga que deberá soportar el pavimento y las condiciones específicas de la colocación.
El espesor habitual de las baldosas cerámicas suele oscilar entre 6 y 10 milímetros. Sin embargo, también existen baldosas más gruesas para aplicaciones específicas.
Ceramiche Keope ofrece baldosas de 20 mm de espesor, aptas para cubrir zonas exteriores con diferentes sistemas de colocación (en seco, sobre solera, elevada). Consulta el catálogo Keope (enlace) para tener una idea de las diferentes posibilidades de proyecto que se adapten mejor a tus necesidades.

El acabado superficial es el tratamiento de una pieza para conseguir determinadas condiciones de rugosidad superficial y tolerancias formales y dimensionales.
La superficie de una baldosa se distingue por sus características visuales y táctiles:

• un acabado natural puede ser liso y mate o suave y satinado, o incluso con una ligera caracterización de la textura;
• una superficie texturizada presenta todas las características de la piedra viva, por ejemplo, relieves, efectos arenosos, ondulaciones;
• una superficie lapeada es lustrosa porque se pule mediante un proceso mecánico sin eliminar material;
• una superficie pulida es todavía más brillosa, porque se pule a alto brillo, eliminando hasta 1 mm de material de la superficie prensada.

Además, una superficie esmaltada está recubierta de una fina capa de material vítreo que determina su color y brillo. 

Las colecciones Keope cumplen todos los requisitos que deben tener las superficies y ofrecen numerosas opciones para diferentes usos y mobiliario.

Las baldosas de interior y exterior pueden presentar algunas diferencias debido a los distintos requisitos y condiciones ambientales a los que están sometidas. Están son algunas de las principales diferencias:

Resistencia a los agentes atmosféricos: las baldosas de exterior deben soportar las inclemencias de los agentes atmosféricos, tales como la lluvia, la nieve, el sol y las variaciones de temperatura. Por ello, suelen estar fabricadas con materiales más resistentes, como el grès porcelánico o la piedra natural, que tienen mayor resistencia a la intemperie que las baldosas de interior. 

Resistencia a la resbaladicidad: las baldosas de exterior deben ofrecer una superficie antideslizante para evitar accidentes causados por suelos mojados o resbaladizos. Por ello, suelen tener un acabado más rugoso o texturizado que las baldosas de interior. 

Absorción de agua: las baldosas de exterior deben tener un bajo índice de absorción de agua para evitar los daños causados por la congelación o la aparición de moho. Las baldosas de interior pueden tener un índice de absorción de agua más elevado, ya que no están expuestas a los mismos niveles de humedad del exterior. 

Resistencia química: las baldosas de exterior pueden estar expuestas a más exposición a productos químicos, como limpiadores o productos de limpieza utilizados en el exterior. Por ello, suelen estar diseñadas para resistir a estos agentes químicos. 

Diseño y acabado: las baldosas de interior suelen favorecer el diseño estético, ofreciendo una amplia gama de colores, decoraciones y acabados. Las baldosas de exterior tienden a ser más funcionales y orientadas a la resistencia, sin embargo hay disponibles opciones de estética agradable para diseñar los espacios al aire libre. 

Es importante tener en cuenta que algunas baldosas pueden ser adecuadas tanto para interiores como para exteriores, dependiendo de sus características y de las necesidades específicas del proyecto. La gama de productos Keope se caracteriza por su continuidad entre interior y exterior.

Las normas de referencia para la resbaladicidad de las baldosas varían en función del país y de la normativa específica adoptada. Sin embargo, una de las normas internacionales más utilizadas para clasificar la resistencia al deslizamiento de las baldosas es la EN 13845, también conocida como «Método de clasificación de los suelos según su resbaladicidad».

La norma EN 13845 establece un sistema de clasificación de la resbaladicidad de las superficies de pavimentos y baldosas basado en el coeficiente de fricción. Esta norma define cuatro clases de resbaladicidad:

Clase R9: baja resistencia al deslizamiento. Esta clase es adecuada para zonas interiores, como cuartos de baño privados o dormitorios, donde el riesgo de resbalar es relativamente bajo.

Clase R10: Resistencia al deslizamiento normal. Esta clase es adecuada para zonas interiores secas, como cocinas domésticas o zonas residenciales de bajo tránsito.

Clase R11: mayor resistencia al deslizamiento. Esta clase es adecuada para zonas interiores húmedas, como baños públicos o cocinas comerciales, donde existe un mayor riesgo de resbalar.

Clase R12: alta resistencia al deslizamiento. Esta clase es adecuada para zonas interiores o exteriores muy húmedas, como baños públicos con duchas o zonas exteriores cerca de piscinas, donde el riesgo de resbalar es especialmente alto.

Es importante tener en cuenta que las normas pueden variar de un país a otro, y que también puede haber otras normativas locales que definen los requisitos de resistencia al deslizamiento de las baldosas. Por consiguiente, siempre es aconsejable consultar las normas locales específicas del país o región para obtener información actualizada sobre las clasificaciones y los requisitos de resbaladicidad de las baldosas. Los productos de Ceramiche Keope pertenecen a las clases de resistencia al deslizamiento que van desde R9 para las series de interior hasta R11 para los productos de exterior. Consulta siempre el catálogo general Keope para obtener información técnica sobre la resistencia al deslizamiento de nuestras colecciones.

Elegir el pavimento o revestimiento adecuado depende de varios factores, como el estilo que se busca, el uso de la habitación, el presupuesto y las preferencias personales. Aquí te indicamos algunos pasos que puedes seguir para tomar una decisión informada:

Definir el estilo: decide qué estilo o ambiente quieres crear en la habitación. Puedes inspirarte mirando revistas de diseño, páginas web o consultar el configurador Keope (Match App - enlace) para hacerte una idea de cómo se verían los suelos en tu habitación. Determina si prefieres un aspecto moderno, rústico, tradicional u otro.

Evaluar la durabilidad: Ten en cuenta la durabilidad del material del suelo. Por ejemplo, para zonas de alto tránsito, como el pasillo o la entrada, puedes elegir un pavimento resistente a los arañazos y al desgaste. Por el contrario, para espacios poco transitados, se pueden considerar materiales más delicados.

Determinar el presupuesto: Decide cuánto quieres gastar para el pavimento y el revestimiento. Hay muchas opciones disponibles a distintos precios. Considera los gastos de colocación y mantenimiento en el presupuesto global.

Consultar un profesional: Si no estás seguro de tu elección o tiene preguntas específicas, puedes consultar a un profesional del equipo Keope. Te ofrecerá un asesoramiento personalizado en función de tus necesidades y presupuesto.

Para los suelos de exterior, además de los productos R11 de espesor normal, la mejor elección es el grès porcelánico de 20 mm de espesor, resistente a los agentes atmosféricos, al desgaste y a las condiciones exteriores. Las baldosas de grès porcelánico son perfectas para pavimentos de exterior por su resistencia a la humedad, perdurabilidad y amplia gama de colores y estilos. Pueden resistir la intemperie, pero es importante elegir baldosas con acabado antideslizante R11 para evitar resbalones cuando se mojan. La elección del producto más adecuado dependerá de tus preferencias estéticas, los requisitos específicos del proyecto, el presupuesto y el mantenimiento deseado. También es oportuno considerar los factores climáticos locales, como las heladas o la luz solar intensa, que pueden influir en la elección del material.

Puedes consultar a un profesional del equipo técnico de Keope para obtener consejos específicos en función de la situación o visitar la sección dedicada a los pavimentos de 20 mm de espesor para espacios exteriores.

Sí, en muchos casos las baldosas para el suelo también pueden utilizarse para revestir la pared. Sin embargo, hay que tener en cuenta algunas consideraciones:

Clasificación de las baldosas: a la hora de elegir las baldosas para un proyecto, es importante comprobar su clasificación. En general, las baldosas se clasifican en función del uso al que se destinan, como baldosas para interiores, exteriores o revestimientos. Las baldosas para suelo están diseñadas para soportar el tránsito y el peso, por lo que suelen ser más gruesas y resistentes que los revestimientos murales. Sin embargo, hay baldosas que están clasificadas tanto para suelos como para paredes, lo que las hace aptas para ambos usos.

Superficie antideslizante: cuando se utilizan baldosas para suelo en la pared, es importante asegurarse de que tengan una superficie antideslizante, sobre todo si se utilizan en entornos como cuartos de baño o cocinas, donde la humedad puede hacerlas resbaladizas.

Estilo y diseño: algunas baldosas pueden tener un aspecto y un estilo más adecuados para su uso como suelo, mientras que otras pueden funcionar bien como revestimiento de pared. Considera el aspecto estético que deseas conseguir y elige baldosas que se adapten a tu proyecto específico.

Instalación y colocación: La colocación de baldosas para suelo en la pared requerirá un método de alicatado adecuado. Respeta las instrucciones del fabricante y consulta a un profesional si es necesario para lograr una colocación adecuada.

En resumen, si las baldosas que has elegido cumplen los requisitos de resistencia, seguridad y estilo para su uso como revestimiento, sin duda puedes utilizarlas de esta manera. Sin embargo, ten en cuenta las consideraciones anteriores y evalúa los requisitos específicos de tu proyecto antes de tomar una decisión definitiva. Siempre puedes consultar nuestras instrucciones de colocación (enlace) para obtener indicaciones precisas sobre la correcta colocación de los pavimentos/revestimientos de Keope.

En el contexto de las baldosas cerámicas, los términos "tono" y "calibre" se refieren a dos características específicas:

Tono: el «tono» se refiere a la variación de color entre las baldosas. Aunque las baldosas se fabriquen en el mismo color, puede haber ligeras diferencias en el tono o la intensidad del color. Estas variaciones pueden deberse a diferentes partidas de producción, a la naturaleza del material cerámico o a otros factores. A la hora de elegir las baldosas, es importante tener en cuenta el tono para conseguir una uniformidad del color, sobre todo si se desea un aspecto homogéneo en todo el suelo o revestimiento. Consulta nuestro catálogo general para conocer el grado de variación de color (identificado por una leyenda de V0 a V4) de nuestras colecciones.

Calibre: el «calibre» es la dimensión de las baldosas cerámicas. Aunque las baldosas se fabrican siguiendo las mismas especificaciones de tamaño, puede haber una ligera variación en las dimensiones reales entre baldosas. Esta variación puede ser ínfima, pero es importante tenerla en cuenta durante la colocación. Por ejemplo, si las baldosas son de distinto calibre, puede ser necesario utilizar espaciadores para garantizar una colocación uniforme. Algunos fabricantes de baldosas indican el calibre de sus baldosas para facilitar la selección y la colocación.

Tanto el tono como el calibre pueden afectar al aspecto final del pavimento o revestimiento. Por lo tanto, si se desea una uniformidad de color y una colocación precisa, es aconsejable comprar todas las baldosas de la misma partida, para que el tono y el calibre sean más homogéneos.
Se recomienda consultar las especificaciones del catálogo general de Keope o a uno de nuestros profesionales para obtener más información y asesoramiento sobre la elección y colocación de baldosas.

La palabra «destonalización» o degradado es un término utilizado para describir una transición de gradaciones de color visibles y no armonizables. Indica que la diferencia de tono de las baldosas individuales no es homogénea.

Keope cuenta en su catálogo con colecciones que juegan con fuertes degradados que recrean las vetas de la piedra natural, ideales para caracterizar pavimentos y revestimientos de exterior e interior con matices hasta ahora inéditos. Por el contrario, otras colecciones se basan en la uniformidad del color para transmitir un mensaje de contemporaneidad, creando revestimientos para zona de día y de noche actuales y de aspecto minimalista. Siempre puedes consultar la variabilidad cromática de las colecciones Keope en el catálogo general; encontrarás la letra V (de 0 a 4) que identifica el grado.

La rectificación es un proceso mediante el cual los cantos de las baldosas se recortan perfectamente con ángulos de 90°. Esto permite colocar las baldosas con juntas mínimas, consiguiendo un resultado estético refinado y elegante. Para los pavimentos colocados combinando varios formatos rectificados, se recomienda una junta de 2 mm. Para los revestimientos realizados con un producto rectificado, se requiere una junta de 2 mm. Los formatos rectificados se utilizan a menudo para baldosas de baño y baldosas de cocina, ambientes con características especiales en cuanto a humedad, suciedad, uso de limpiadores. En estos casos tener una junta mínima ayuda a la limpieza y asegura una mejor sujeción del revestimiento. Las baldosas no rectificadas tienen bordes naturales prensados y requieren una junta mayor.

La cerámica se puede considerar como un material respetuoso con el medioambiente, sin embargo, cabe tener en cuenta algunos factores:

Materias primas: la cerámica se fabrica principalmente con arcilla, arena y otros materiales naturales abundantes. Estos materiales están disponibles en grandes cantidades y no se consideran recursos agotables. Ceramiche Keope siempre ha trabajado seleccionando las materias primas de mayor calidad y más puras.

Producción de energía: el proceso de producción de cerámica requiere energía para la extracción de las materias primas, el procesamiento y la cocción de las baldosas. En la planta de producción de KEOPE se realiza la depuración de las emisiones gaseosas de acuerdo a la normativa vigente, se reutilizan por completo el agua y los residuos sólidos del procesamiento y se hace la recogida selectiva de todos los demás residuos. En la fábrica también hay instalada una planta de cogeneración que limita las necesidades energéticas y garantiza un bajo nivel de emisiones nocivas.

Duración y reciclabilidad: la cerámica es un material muy resistente y puede durar mucho tiempo. Esta duración reduce la necesidad de sustituciones frecuentes y contribuye a reducir los residuos. Ceramiche Keope también recicla y reutiliza parte de los desechos del proceso.

Sustancias químicas: Ceramiche Keope se esfuerza constantemente por reducir el uso de sustancias químicas nocivas y ofrecer baldosas que cumplan la normativa en materia de salud y seguridad. A lo largo de los años, ha obtenido numerosas certificaciones que acreditan la seguridad de las sustancias utilizadas en la producción de baldosas cerámicas. Consulta las últimas certificaciones aquí (enlace).

Para hacer una elección más sostenible, puedes elegir baldosas Keope certificadas por organismos que promueven la sostenibilidad, como LEED o ISO 14001 Consulta nuestra sección de política ambiental (enlace) para obtener una visión general de nuestras prácticas respetuosas con el medioambiente.

La certificación LEED es uno de los sistemas más utilizados para certificar edificios, desde la fase de proyecto hasta la gestión diaria. LEED, (acrónimo de Leadership in Energy & Environmental Design), es una certificación internacional que define nuevos criterios de diseño para los edificios en los que vivimos, trabajamos o estudiamos. La certificación LEED garantiza a los comitentes y a los usuarios finales del edificio un diseño orientado a lograr un alto rendimiento en áreas clave para la salud humana y medioambiental, tales como: el desarrollo sostenible de la obra, el ahorro de agua, la eficiencia energética, la elección de materiales y la calidad ambiental interior, teniendo en cuenta todo el ciclo de vida del edificio.

Las colecciones Keope cumplen los criterios LEED y la mayoría de los productos Keope, gracias a sus características sostenibles y a las elevadas cantidades de materiales reciclados utilizados en la masa de grès porcelánico, pueden contribuir a aumentar la puntuación LEED de los edificios en los que se utilizan.

Algunas prácticas sostenibles en la producción de cerámica incluyen el uso de materias primas recicladas o reciclables, la optimización del uso de los recursos hídricos y energéticos, la adopción de procesos de producción con bajo impacto ambiental y el uso de embalajes sostenibles.
Keope tiene el objetivo de minimizar el derroche y recicla las aguas residuales vertiéndolas en plantas de tratamiento para su reutilización interna o externa, recupera los materiales crudos residuales de la producción y utiliza palets FAO fabricados con madera reciclada para el almacenamiento y transporte de los productos.
Gracias a las plantas de cogeneración, la empresa alcanza altos niveles de eficiencia energética, reduciendo su huella ecológica.
El camino virtuoso emprendido por Keope para proteger el medioambiente se ve corroborado por numerosas certificaciones «verdes», una prueba tangible de la voluntad de la empresa de crear productos que contribuyan a la construcción de edificios acordes con las normas exigidas por la transición ecológica.

Entre otras, Ceramiche Keope ha conseguido recientemente una certificación muy importante: la ISO 17889 Sostenibilidad para azulejos cerámicos, la primera norma ISO que certifica la sostenibilidad de un producto específico. Keope, junto con las demás marcas del Grupo Concorde, es la primera a escala internacional que la ha obtenido.
La ISO 17889 certifica la sostenibilidad medioambiental de los productos, los procesos de producción y los suministros, así como la responsabilidad social de la empresa, la seguridad en el lugar de trabajo y la eficiencia energética en todas las fases de producción.

Este último hito importante se ha alcanzado tras otros logros: la certificación de los créditos WELL Building Standard V2, obtenida en 2021, que certifica la salubridad de un edificio con revestimiento de grès porcelánico Keope, y DECLARE, que constata la ausencia de sustancias químicas nocivas para el medio ambiente en los productos.

Todos los productos de la gama Keope son «VOC free», es decir, no emiten sustancias orgánicas volátiles.

VOC (Volatile Organic Compounds) es el acrónimo inglés de «compuestos orgánicos volátiles». La expresión «VOC-free» significa «sin COV» y se refiere a productos o materiales que no contienen ni emiten sustancias químicas volátiles a la atmósfera.
Los compuestos orgánicos volátiles son moléculas orgánicas que pueden evaporarse fácilmente a temperatura ambiente. Algunos ejemplos comunes de COV son el benceno, el tolueno, el formaldehído y los disolventes. Estas sustancias pueden ser emitidas por diversos productos, como pinturas, esmaltes, adhesivos, productos de limpieza, revestimientos y materiales de construcción.

La etiqueta «VOC free» de un producto indica que ha sido formulado o fabricado para minimizar la presencia o emisión de compuestos orgánicos volátiles. Esto puede ayudar a mejorar la calidad del aire interior, reducir el impacto ambiental y promover una mayor seguridad para la salud de los usuarios.

Sí, las baldosas Keope ayudan a proteger la salud, mejorando las características de los ambientes en los que revisten suelos y superficies.

El grès porcelánico Keope es higiénico, su superficie compacta, no porosa e impermeable facilita las operaciones de limpieza, bloqueando la proliferación de bacterias, hongos, moho y otras sustancias irritantes.
La alta resistencia a los agentes químicos permite el uso de limpiadores más eficaces, que eliminan por completo virus y bacterias.
La cocción a más de 1200 °C hace que la cerámica Keope sea inerte, lo que significa que no interactúa con nuestro organismo, por lo que es totalmente no alergénica.
La cerámica Keope no libera ningún compuesto orgánico volátil (COV), como el formaldehído y otras sustancias que cuando se dispersan en el aire de estancias cerradas se encuentran entre las causas del «Síndrome del Edificio Enfermo» (SEE).
Por último, pero no por ello menos importante, las cerámicas de Keope tienen la máxima categoría de resistencia al fuego: esto significa que no arden y no liberan humo ni otras sustancias a cualquier temperatura y en cualquier condición.

El grès porcelánico es conocido por su baja porosidad, lo que significa que tiene poca capacidad para absorber líquidos. Sin embargo, pese a ser resistente a las manchas, el grès porcelánico puede mancharse en determinadas circunstancias. Estas son algunas de las razones por las que el grès porcelánico puede mancharse:

Sustancias agresivas naturales: algunas sustancias, como los ácidos que se encuentran en alimentos como el zumo de limón o el vinagre, pueden provocar manchas en el grès porcelánico si no se limpian de inmediato. Dejar que estas sustancias actúen sobre la superficie del grès porcelánico durante mucho tiempo puede provocar la aparición de manchas.

Sustancias aceitosas: los aceites, grasas y sustancias aceitosas pueden dejar manchas en el grès porcelánico. Por ejemplo, si se derrama aceite de cocina en el suelo y no se limpia a tiempo, podría dejar una mancha.

Pigmentos de color intenso: algunos pigmentos de color intenso que se encuentran en alimentos, bebidas o productos de cuidado personal, como el vino tinto, el café, el té, las especias o los cosméticos, pueden provocar manchas si entran en contacto prolongado con el grès porcelánico.

Infiltración en las juntas: si bien el grès porcelánico tiene una baja porosidad, las juntas entre baldosas pueden ser más porosas y propensas a la absorción de sustancias que manchan, como líquidos de color o aceites. Si las juntas no se han sellado correctamente, pueden producirse manchas.

Es importante tener en cuenta que, aunque el grès porcelánico Keope sea resistente a las manchas, una limpieza oportuna y habitual es esencial para evitar la formación de manchas permanentes. Se recomienda utilizar limpiadores neutros y no abrasivos y limpiar de inmediato cualquier líquido o sustancia que pueda provocar manchas en la superficie de grès porcelánico.

Para un consejo personalizado sobre el mantenimiento y la limpieza de tus pavimentos o revestimientos Keope y para conocer qué productos utilizar en el hogar, escríbenos o consulta nuestras sugerencias para eliminar las manchas en la tabla (enlace pdf).

El grès porcelánico es considerado un material muy resistente a los arañazos, pero algunas sustancias u objetos duros pueden provocar marcas en su superficie. Estas son algunas de las cosas que pueden rayar el grès porcelánico:

Arena o residuos: la arena, la suciedad u otras partículas abrasivas pueden rayar el grès porcelánico si se arrastran sobre la superficie. Limpiar el suelo con regularidad para eliminar este tipo de residuos ayuda a evitar arañazos.

Objetos puntiagudos o duros: los objetos puntiagudos, como puntas de tacones altos u objetos metálicos, pueden causar arañazos en la superficie del grès porcelánico si se arrastran o se dejan caer. No hay que arrastrar objetos pesados o puntiagudos por la superficie y hay que utilizar protectores (tipo conteras, fieltros) para los muebles o posavasos para evitar daños.

Materiales abrasivos: el uso de esponjas o paños abrasivos, cepillos duros o productos de limpieza abrasivos sobre la superficie de grès porcelánico puede provocar arañazos. Se recomienda utilizar materiales suaves y no abrasivos para la limpieza.

Errores en la colocación: pueden producirse arañazos si el grès porcelánico no se ha colocado correctamente o si existen irregularidades en la colocación de las baldosas. Además, en el acabado pulido se pueden notar los arañazos más fácilmente que en un acabado mate.

Mantenimiento incorrecto: un mantenimiento inadecuado, como el uso de productos químicos o limpiadores inapropiados o la falta de limpieza regular, puede provocar la acumulación de sustancias que podrían rayar la superficie de grès porcelánico.

Para evitar arañazos en el grès porcelánico Keope, es importante tomar algunas precauciones. Mantén el suelo limpio, evita el uso de materiales abrasivos y utiliza protectores (conteras o fieltros) o alfombras bajo las patas de los muebles pesados. Si es posible, coloca un felpudo en la entrada de la casa o edificio para ayudar a eliminar los residuos externos de debajo de las suelas de los zapatos (esencial en algunas partes del norte de Europa debido al tipo de arena que es muy rica en cuarzo). Además, sigue siempre nuestras instrucciones de limpieza y mantenimiento (enlace) para conservar la belleza y la integridad del grès porcelánico por mucho tiempo.

Sigue estos pasos para limpiar el grès porcelánico:

Aspirar o barrer: antes de empezar a limpiar, elimina el polvo, la arena y la suciedad superficial barriendo el suelo con una escoba de cerdas suaves o utilizando un aspirador con un cepillo para suelos, de esta manera evitarás arañazos durante la limpieza.

Preparación de la solución limpiadora: prepara una solución limpiadora diluyendo en agua tibia un limpiador neutro o específico para suelos de grès porcelánico. No utilices productos que contengan ácidos, lejía o amoniaco, ya que pueden dañar la superficie de grès porcelánico.

Limpieza de la superficie: utiliza una fregona o una esponja suave para aplicar la solución limpiadora sobre la superficie de grès porcelánico. No hay que mojar demasiado el suelo para evitar que el agua se filtre en las juntas. Limpia el pavimento por secciones, trabajando en pequeñas zonas cada vez.

Cepillado o fregado: Si el grès porcelánico presenta manchas difíciles o suciedad incrustada, puedes utilizar un cepillo de cerdas suaves o una esponja abrasiva no agresiva para fregar suavemente la zona afectada. Realiza movimientos circulares o lineales y aplica una ligera presión para no dañar la superficie.

Aclarado: aclara bien el suelo con agua limpia para eliminar los restos de limpiador. Elimina completamente la solución limpiadora para que no se formen halos o marcas.

Secado: seca el suelo con un paño seco o déjalo secar naturalmente. No camines sobre el suelo hasta que esté completamente seco para no resbalar ni dejar huellas.

Recuerda que la limpieza regular del grès porcelánico es importante para mantenerlo en buen estado. No utilices productos abrasivos o duros, como cepillos de alambre o estropajos, ya que pueden rayar la superficie. Evita también el uso de productos ácidos o lejía que podrían causar daños permanentes. Respeta siempre las instrucciones del fabricante para la limpieza y el mantenimiento específicos del tipo de grès porcelánico.

El grès porcelánico es un material muy resistente y duradero, pero algunas prácticas o sustancias pueden dañarlo. Estas son algunas de las cosas que pueden estropear el grès porcelánico:

Productos químicos agresivos: el uso de productos químicos agresivos, como lejía, amoniaco o limpiadores ácidos, puede dañar la superficie de grès porcelánico. Estos productos pueden provocar la pérdida de color, manchas permanentes o corrosión del acabado.

Productos abrasivos: el uso de esponjas abrasivas, estropajos o cepillos con cerdas duras puede rayar la superficie del grès porcelánico. No utilices este tipo de productos de limpieza y elige esponjas o cepillos con cerdas suaves.

Objetos puntiagudos o duros: procura que no caigan objetos pesados o puntiagudos sobre la superficie de grès porcelánico, ya que pueden provocar grietas o desconchones. Utiliza alfombrillas o protectores para patas de muebles (conteras, fieltros) para evitar arañazos o daños causados por objetos duros.

Suciedad abrasiva: la presencia de arena, grava o residuos abrasivos en la superficie de grès porcelánico puede provocar arañazos durante el desplazamiento o la limpieza. Se recomienda aspirar o barrer regularmente para eliminar estos restos.

Agua estancada: no permitas que se acumule agua estancada en el suelo de grès porcelánico, especialmente en las juntas. El agua puede filtrarse en las juntas y, con el tiempo, causar daños, tales como manchas o formación de moho.

Temperatura extrema: aunque el grès porcelánico es resistente a las variaciones de temperatura, los choques térmicos extremos pueden provocar grietas o daños estructurales. Se recomienda evitar la exposición a fuentes de calor intenso o cambios bruscos de temperatura.

Es importante seguir las instrucciones de Ceramiche Keope para la limpieza y mantenimiento del suelo de grès porcelánico (enlace). Si tienes alguna duda o problema específico, consulta a uno de nuestros profesionales del equipo técnico para que te asesore adecuadamente.

Sigue estos pasos para eliminar las manchas del pavimento de grès porcelánico:

Limpieza diaria: comienza siempre con una limpieza general del suelo utilizando una escoba de cerdas suaves o un aspirador para eliminar el polvo, suciedad y restos superficiales.

Limpiador neutro: prepara una solución de agua tibia y limpiador neutro. Utiliza una escoba o un paño suave para limpiar el suelo con esta solución. No utilices limpiadores demasiado agresivos o abrasivos, ya que podrían dañar la superficie del grès porcelánico.

Manchas de comida o bebida: para eliminar las manchas de comida o bebida, tales como café, vino o aceite, prueba con una solución de agua tibia y detergente lavavajillas suave. Aplica la solución sobre la mancha, déjala actuar unos minutos, luego usa un paño limpio para refregar la zona suavemente. Aclara bien con agua limpia.

Manchas difíciles: Si hay manchas más persistentes, como las causadas por grasa, esmalte de uñas o pintura, puede que necesites utilizar un disolvente específico para ese tipo de mancha. Lee detenidamente las instrucciones del producto y haz primero una prueba en una zona pequeña y poco visible del suelo para evitar daños.

Manchas de cal: para las manchas de cal, puedes utilizar un producto antical específico para suelos de grès porcelánico. Aplica el producto siguiendo las instrucciones del fabricante, déjalo actuar el tiempo recomendado y después aclara con abundante agua.

Limpieza diaria preventiva: para que no se formen manchas, limpia el suelo con regularidad y sécalo de inmediato en caso de derrames. Además, no utilices productos químicos agresivos, tales como ácido o lejía, pues podrían estropear la superficie del grès porcelánico.

Recuerda siempre seguir las instrucciones específicas de los productos que utilizas y hacer una prueba en una zona pequeña y poco visible antes de aplicarlos en todo el suelo. Consulta en este enlace la tabla de los productos para eliminar las manchas más frecuentes.

Sigue estos pasos para eliminar los halos del pavimento de grès porcelánico:

Limpieza general: comienza limpiando el suelo con un limpiador neutro y agua tibia. Utiliza una fregona o esponja suave para aplicar la solución limpiadora y eliminar la suciedad superficial. Aclara bien el suelo para eliminar los restos de limpiador.

Limpieza específica de halos/marcas: si las marcas persisten a pesar de la limpieza general, prueba utilizando un limpiador más concentrado o específico para eliminar las manchas. Sigue las instrucciones del fabricante y haz una prueba con el limpiador en una zona pequeña y no visible del suelo para comprobar su compatibilidad y eficacia.

Cepillo de cerdas suaves: En algunos casos, puede ser útil usar un cepillo de cerdas suaves para ayudar a eliminar los halos/marcas persistentes. Utiliza un cepillo con cerdas no abrasivas para que no dañe la superficie del pavimento. Frota suavemente la zona afectada con el cepillo y aclara bien.

Limpieza regular: Para evitar la formación de halos en los suelos de grès porcelánico, es importante realizar una limpieza periódica utilizando limpiadores adecuados para mantener la superficie limpia y libre de residuos.

Se recomienda consultar las instrucciones de Keope o ponerse en contacto con uno de los miembros de nuestro equipo técnico y probar cualquier solución o producto en una zona pequeña y poco visible antes de utilizarlo en toda la superficie. Asimismo, evite el uso de sustancias abrasivas o ácidos fuertes que puedan dañar el suelo.

Estos son los pasos para limpiar el grès porcelánico después de una obra:

• Aspira o barre el suelo para eliminar los restos gruesos.
• Prepara una solución limpiadora diluida. Puedes utilizar un limpiador de suelos no abrasivo o un limpiador específico para grès porcelánico. Diluye el limpiador siguiendo las instrucciones del envase.
• Vierte la solución limpiadora sobre un paño suave o una esponja.
• Pasa el paño o la esponja con movimientos circulares sobre la superficie del suelo.
• Aclara el suelo con agua limpia.
• Limpia el suelo con un paño suave.

Si hay manchas persistentes, puedes utilizar un limpiador más fuerte. Sin embargo, es importante probar el limpiador en una zona oculta del suelo antes de utilizarlo en toda la superficie.

Estos son algunos consejos adicionales para limpiar el grès porcelánico:

• No utilices limpiadores abrasivos o productos químicos agresivos.
• No friegues el suelo con demasiada fuerza, ya que podrías dañarlo.
• Seca bien el suelo después de limpiarlo para que no se formen manchas.
• Con los cuidados adecuados, el grès porcelánico puede mantener su belleza durante muchos años.

Sigue estos pasos para eliminar la silicona de las baldosas de grès porcelánico Keope:

Ablandar la silicona: sigue las instrucciones indicadas en la tabla del catálogo general de Keope (link) y aplica el producto sobre la silicona que quieras eliminar. Deja actuar el tiempo indicado para ablandar la silicona.

Rascar la silicona: utiliza una espátula de plástico para desprender la silicona reblandecida de la superficie del grès porcelánico. Procura no rayar las baldosas. También puedes utilizar una rasqueta limpiacristales o una hoja de afeitar, pero debes trabajar delicadamente para evitar daños.

Limpiar los residuos: después de quitar la silicona, pueden quedar algunos residuos o manchas difíciles de eliminar. Utiliza un paño humedecido con alcohol desnaturalizado o acetona para limpiar con cuidado la zona afectada. Haz una prueba con el alcohol desnaturalizado o la acetona en una zona poco visible del grès porcelánico para comprobar que no daña la superficie.

Aclarar y secar: después de limpiar los restos de silicona, aclarar la superficie con agua limpia y secarla completamente con un paño seco.

Si tienes alguna duda o si la silicona es especialmente resistente, consulta a un profesional de nuestro equipo de calidad (formulario de enlace).

Sigue estos pasos para eliminar la cal del grès porcelánico:

Preparar una solución de vinagre y agua: mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua en un cubo o barreño. El vinagre tiene propiedades ácidas disuelven la cal.

Aplicar la solución sobre la superficie: utiliza una esponja o un paño suave para aplicar la solución de vinagre y agua en las zonas con cal. Cubre completamente las manchas de cal.

Dejar actuar durante un instante: deja que la solución de vinagre actúe sobre la superficie del grès porcelánico durante al menos 10-15 minutos. De esta manera, el vinagre tendrá tiempo de disolver la cal.

Frotar suavemente: utiliza un cepillo de cerdas suaves o una esponja para frotar suavemente la zona afectada. No utilices cepillos demasiado duros, ya que podrían rayar el grès porcelánico.

Aclarar con agua limpia: después de fregar la zona, aclara bien con agua limpia para eliminar la solución de vinagre y la cal disuelta.

Secar la superficie: utiliza un paño seco o una mopa para secar la superficie del grès porcelánico. Elimina todo el exceso de agua.

Si la cal resiste o las manchas son muy persistentes, utiliza productos específicos para la eliminación de la cal disponibles en el mercado. Sigue las instrucciones de nuestra tabla (enlace) y haz una prueba en una zona poco visible del grès porcelánico Keope para comprobar que el producto no daña la superficie.

A veces, los limpiadores comerciales normales contienen ceras o aditivos abrillantadores que, lavado tras lavado, depositan una pátina brillante en el suelo, provocando halos. Algunos materiales de rejuntado también suelen formar pátinas de este tipo. Además del efecto de halos y aumento del brillo, estas pátinas, al mojarse con agua, pueden acentuar el efecto repelente al agua. Para preguntas y consejos de limpieza, visita la sección específica o rellena el formulario de la sección de contacto y serás contactado por uno de nuestros responsables técnicos. Para obtener consejos sobre los productos que deben utilizarse para eliminar los restos de lechada u otros residuos, consulta nuestras instrucciones de limpieza y mantenimiento (enlace)

Sí, la cerámica requiere un determinado mantenimiento para preservar su belleza por largo tiempo. Aquí hay algunos puntos importantes a tener en cuenta para el mantenimiento de la cerámica:

Limpieza periódica: limpiar con regularidad es esencial para mantener la cerámica en buen estado. Elimina el polvo y la suciedad superficial con una escoba o aspirador. Para limpiar el suelo, utiliza una solución limpiadora neutra o específica para baldosas cerámicas diluida en agua. No utilices productos químicos abrasivos que podrían dañar la superficie cerámica. Sigue las instrucciones de limpieza de nuestra sección específica (enlace).

Eliminación de manchas: Si aparecen manchas en la cerámica, por ejemplo de comida o grasa, límpialas rápidamente. Utiliza detergentes específicos para eliminar las manchas. No dejes caer sustancias ácidas o corrosivas sobre la cerámica, ya que pueden causar manchas permanentes.

Protección contra desconchones y arañazos: En general, la cerámica es resistente a desconchones y arañazos, pero aún así puede resultar dañada por objetos pesados o afilados. No arrastres los muebles pesados sobre la cerámica y utiliza alfombrillas o fieltros bajo las patas de los muebles para proteger la superficie.

Mantenimiento periódico: comprueba periódicamente el estado de las baldosas y de las juntas. Si observas baldosas sueltas, dañadas o juntas deterioradas, repáralas o sustitúyelas.

Siguiendo unas instrucciones básicas de mantenimiento, conservarás el aspecto de las baldosas cerámicas por largo tiempo. Visita nuestra sección dedicada a la limpieza y mantenimiento del grès porcelánico Keope

Sigue estos pasos para limpiar el grès porcelánico de 20 mm de espesor:

Aspirar o barrer: antes de empezar a limpiar, elimina el polvo, la arena y la suciedad superficial barriendo el suelo con una escoba de cerdas suaves o utilizando un aspirador con un cepillo para suelos, de esta manera evitarás arañazos durante la limpieza.

Preparación de la solución limpiadora: prepara una solución limpiadora diluyendo en agua tibia un limpiador neutro o específico para suelos de grès porcelánico. No utilices productos que contengan ácidos, lejía o amoniaco, ya que pueden dañar la superficie de grès porcelánico.

Limpieza de la superficie: utiliza una fregona o una esponja suave para aplicar la solución limpiadora sobre la superficie de grès porcelánico. No hay que mojar demasiado el suelo para evitar que el agua se filtre en las juntas. Limpia el pavimento por secciones, trabajando en pequeñas zonas cada vez.

Cepillado o fregado: Si el grès porcelánico presenta manchas difíciles o suciedad incrustada, puedes utilizar un cepillo de cerdas suaves o una esponja abrasiva no agresiva para fregar suavemente la zona afectada. Realiza movimientos circulares o lineales y aplica una ligera presión para no dañar la superficie.

Aclarado: aclara bien el suelo con agua limpia para eliminar los restos de limpiador. Elimina completamente la solución limpiadora para que no se formen halos o marcas.

Secado: seca el suelo con un paño seco o déjalo secar naturalmente. No camines sobre el suelo hasta que esté completamente seco para no resbalar ni dejar huellas.

Recuerda que la limpieza periódica del grès porcelánico de exterior de 20 mm de espesor es importante para mantenerlo en buen estado. No utilices productos abrasivos o duros, como cepillos de alambre o estropajos, ya que pueden rayar la superficie. Evita también el uso de productos ácidos o lejía que podrían causar daños permanentes. Respeta siempre las instrucciones de limpieza y mantenimiento de Keope específicas para el grès porcelánico para exterior.

El grès porcelánico debe ser colocado por un solador/alicatador cualificado. Los pasos a seguir son:

Preparación del soporte: el soporte debe estar nivelado, seco y sin imperfecciones.

Colocación del mortero: el mortero debe colocarse en una capa uniforme de aproximadamente 1-2 mm.

Colocación de las baldosas: las baldosas deben
colocarse sobre el mortero formando una superficie uniforme.

Fijación de las baldosas: las baldosas deben fijarse al mortero con un mazo de goma.

Rejuntado: las juntas entre las baldosas deben rellenarse con un sellador para evitar la formación de moho y bacterias.

Existen diferentes tipos de colocación de grès porcelánico, en función del efecto estético deseado y de las características del pavimento. Los tipos de colocación de grès porcelánico más comunes son:

Junta corrida: es el método de colocación más sencillo y tradicional. Las baldosas se colocan en fila, una al lado de la otra, paralelas a las paredes.

Colocación en espiga (espina de pescado): esta colocación confiere al suelo un efecto elegante y refinado. Las baldosas se colocan formando una V, con ángulos a 90° hacia arriba.

Colocación en mosaico: esta instalación es ideal para pavimentos pequeños. Las baldosas se colocan de forma irregular, creando un patrón geométrico.

Colocación en damero: esta colocación es muy elegante y refinada. Las baldosas se colocan en dos filas paralelas, una de baldosas claras y otra de baldosas oscuras.

Colocación Chevron: esta colocación confiere al suelo un efecto moderno y contemporáneo. Las baldosas se colocan formando una V, con los ángulos a 45° hacia adentro.

La elección del tipo de colocación del grès depende de varios factores, entre ellos:

• Las medidas del suelo.
• El estilo de los muebles.
• Las características del gres.
  

Es importante contar con un solador cualificado para conseguir el mejor resultado. Sigue nuestras indicaciones de colocación en la página específica.

La colocación de grès imitación madera depende de tu estilo personal y de tus preferencias. Sin embargo, hay algunas opciones comunes que puedes considerar:

Posición horizontal: Este es el método más común de colocación de baldosas de imitación madera. Las baldosas se colocan horizontalmente, creando un aspecto similar al de los suelos de madera tradicionales. Esta colocación es versátil y encaja bien en distintas habitaciones, como salones, dormitorios y pasillos.

Colocación en diagonal: Si deseas un aspecto más interesante y distintivo, puedes considerar la colocación en diagonal. En este caso, las baldosas se colocan en diagonal respecto a las paredes, creando un efecto visual único. Este tipo de colocación puede dar la ilusión de una habitación más grande y añadir un toque de originalidad al diseño general.

Colocación en espiga (espina de pescado): Esta colocación es muy popular y ofrece un aspecto elegante y refinado. Las baldosas se colocan formando un patrón en espiga (espina de pescado), con ángulos de 90 grados. / Las baldosas se colocan formando un patrón chevron, con ángulos de 45 grados. Este tipo de colocación requiere más precisión y una planificación cuidadosa, pero puede añadir un elemento de diseño refinado al ambiente.

Colocación por encastre: Esta instalación es similar a la posición horizontal, pero las baldosas se encastran entre sí, sin dejar espacio entre ellas. Esto crea un aspecto más uniforme y liso, sin interrupciones visuales. Es especialmente adecuada para ambientes modernos y minimalistas. 

La gama de colecciones de grès porcelánico imitación madera de Ceramiche Keope (enlace) incluye diferentes formatos y espesores, consulta las instrucciones de colocación aquí (enlace).

No, la junta siempre es necesaria, pero dependiendo del tipo de baldosa o, mejor dicho, del tipo de canto de la baldosa, puede ser más estrecha (2 mm) o más ancha (hasta 5 mm). En general, la colocación de las baldosas varía en función de las características de la colección. Es importante combinar bien el producto y mantener juntas muy angostas. Si las baldosas están rectificadas (el canto está recortado perfectamente a 90 grados) pueden colocarse con una junta mínima de 2 mm para crear un efecto refinado y elegante. El resultado final es impactante y suele recomendarse para productos modernos y tecnológicos, como los formatos grandes. En el caso de baldosas más clásicas o rústicas, en las que el canto no está recortado sino que queda natural después de la cocción, se suele recomendar una junta ligeramente más ancha, de unos 4 o 5 mm, para que el efecto final esté en armonía con las características estéticas y funcionales de las baldosas. Es importante saber que cuanto más estrecha es la junta, más rígida se vuelve la baldosa y, en determinados casos de movimientos estructurales de soleras y forjados, pueden producirse deformaciones y roturas de las baldosas colocadas.

Aquí puedes leer más en nuestra sección sobre los consejos de colocación (enlace)

Por colocación a tope se entiende la instalación de baldosas cerámicas una pegada a la otra. Sin embargo, las normas y reglas de colocación para una correcta instalación determinan que debe haber una junta mínima de 2 mm. Los materiales utilizados con este tipo de junta deben ser rectificados, es decir, con cantos con «aristas vivas». Para dar a la superficie un efecto más continuo, se recomienda el rejuntado del mismo tono. Puedes leer más en nuestra sección sobre consejos de colocación de baldosas Keope aquí (enlace)

La limpieza «tras la colocación» sirve para eliminar los residuos de material de rejuntado, cemento, cal, lechada. Es necesaria al final de la obra, tanto para las baldosas esmaltadas como para las no esmaltadas. Una limpieza «tras la colocación» incorrecta, o incluso no realizada, es a menudo la causa de halos que impiden que el suelo se mantenga limpio a pesar de una buena limpieza diaria. Siempre que sea posible, especialmente para superficies medianas y grandes, se recomienda el uso de una máquina monodisco con discos blandos (blancos o beige). Las lechadas de cemento mezcladas con agua se limpian con productos específicos a base de ácidos tamponados y diluidos (disponibles en el mercado). Para obtener consejos sobre los productos que deben utilizarse para eliminar los restos de lechada u otros residuos, consulta nuestras instrucciones de limpieza y mantenimiento (enlace)

El azulejo más antiguo jamás descubierto data de hace unos 4000 años y fue hallado en la ciudad de Ur, en Mesopotamia (actual Irak). Este azulejo de arcilla esmaltada data de la época de la antigua civilización sumeria y está decorado con un motivo geométrico en forma de estrella. Es un importante testimonio del antiguo arte de la cerámica y de la técnica de esmaltado utilizada en aquella época. El descubrimiento de este azulejo ofrece una interesante visión de la historia del arte y de la producción de cerámica en la civilización sumeria.

La barbotina es el resultado de mezclar materias primas cerámicas molidas con agua. Se trata, por tanto, de una «suspensión» en agua que debe mantenerse en constante agitación para que no sedimente. Durante el proceso de producción, la barbotina se introduce en el atomizador para producir el producto atomizado.

El tiempo de producción de una baldosa depende de varios factores, principalmente del método de producción utilizado.
Keope produce gres porcelánico a nivel industrial; en este contexto, la variable más importante es el tiempo necesario para cocer la baldosa, que está estrechamente relacionado con el tamaño y el espesor de la baldosa, así como con la longitud del horno.
Una baldosa Keope de 60x60 cm tarda unos 45 minutos en cocerse, mientras que una de espesor grueso de 120x120 tarda casi 2 horas.

Nuestras prensas ejercen una fuerza de más de 500 kg/cm² de material. Para dar una idea, cuando se fabrica una placa de 120x120 cm, la prensa ejerce una fuerza total de más de 7500 toneladas, lo que equivale a 1200 elefantes o a toda la Torre Eiffel.

El «ojo digital» forma parte de los avanzados sistemas de control de calidad de la planta de producción de Keope. Esta tecnología se basa en la monitorización óptica en tiempo real de la producción.
Gracias a la inteligencia artificial, el sistema, una vez entrenado, es capaz de reconocer defectos e imperfecciones en las baldosas durante la producción. La monitorización en la selección ayuda a separar el material conforme del material imperfecto de calidad inferior. El ojo digital situado al final de la línea de decoración cumple una función aún más importante, al detectar defectos en el material antes de su cocción; éste se recoge como residuo crudo, lo que permite aumentar la eficacia de la producción al evitar el derroche de energía en la cocción de baldosas defectuosas.

Las baldosas Keope pueden ayudar a proteger la salud de varias maneras:

Higiene: los suelos de gres Keope son fáciles de limpiar y desinfectar, lo que los convierte en una excelente opción para entornos en los que se requiere un alto nivel de higiene, como baños y cocinas. La superficie lisa y no porosa de las baldosas facilita la limpieza y evita la proliferación de bacterias, moho y alérgenos.

Hipoalergenicidad: las baldosas Keope son hipoalergénicas. Esto ayuda a reducir el riesgo de reacciones alérgicas o irritaciones.

Resistencia al fuego: las baldosas son materiales resistentes al fuego, lo que significa que no arden ni emiten humo tóxico cuando se exponen al calor o al fuego. Esto puede ayudar a evitar la propagación de sustancias volátiles nocivas para la salud.

Las baldosas Keope son ecológicas no sólo por su composición, sino también porque son muy duraderas y requieren poco mantenimiento: las baldosas Keope son conocidas por su durabilidad y longevidad. Si se instalan correctamente, pueden resistir el desgaste, a la abrasión y a la humedad durante decenas de años sin apenas mantenimiento. Esto reduce la necesidad de sustituirlas con frecuencia, lo que disminuye la cantidad de residuos generados.

Elegir una baldosa adecuada y segura puede ayudar a prevenir lesiones y accidentes de varias maneras. Aquí damos algunas razones por las que una baldosa bien seleccionada puede servir a este propósito:

Superficie antideslizante: las baldosas diseñadas para entornos húmedos, como baños, cocinas, zonas de spa y piscinas, tienen superficies antideslizantes. Esto reduce el riesgo de resbalones y caídas, especialmente cuando el suelo está mojado.

Resistencia al desgaste: las baldosas de calidad son duraderas y resistentes al desgaste. Un suelo que mantiene su integridad a lo largo del tiempo reduce el riesgo de accidentes relacionados con roturas o grietas.

Higiene: las baldosas suelen elegirse para zonas donde la higiene es primordial, como cuartos de baño, vestuarios, zonas de spa, piscinas interiores y exteriores. Su superficie no porosa reduce la acumulación de gérmenes, bacterias y mohos, promoviendo un entorno más seguro para los usuarios.

Resistencia al fuego: Las baldosas son ignífugas y nunca contribuirán a la propagación de las llamas en caso de incendio, manteniendo el entorno más seguro.

Resistencia al agua: Las baldosas se utilizan a menudo en zonas expuestas al agua, como piscinas o zonas al aire libre. Su resistencia al agua ayuda a mantener el suelo seco, reduciendo el peligro de resbalones.

Recuerda siempre que la correcta colocación de las baldosas, incluida la aplicación adecuada de los materiales de fijación y la planificación de las juntas de dilatación, es esencial para garantizar la seguridad a largo plazo. Una colocación profesional reduce el riesgo de accidentes relacionados con problemas estructurales o pendientes incorrectas. Consulta siempre los métodos de instalación correctos en nuestro sitio web.

No te lo vas a creer, pero nuestro almacén maneja aproximadamente 3000 referencias de productos. Cada día miles de códigos viajan por nuestros sistemas de gestión, trabajando en sincronía entre departamentos y permitiendo un flujo de trabajo rápido, desde la realización de un pedido por parte del servicio de atención al cliente hasta su procesamiento en la oficina de expediciones.